La clave para imprimar diferentes superficies
07/11/2015 | Dunn Edwards |
La mayoría de los pintores saben que una de las claves de un buen trabajo de pintura es la imprimación, pero entender todos los entresijos de la imprimación -desde qué y cuándo imprimar, hasta elegir el producto adecuado para el trabajo- puede ser todo un reto. Así que vamos a profundizar en este importante recubrimiento.
En primer lugar, ¿qué es exactamente la imprimación? Es un revestimiento preparatorio que suele aplicarse a los sustratos antes de pintar y que sirve para una serie de propósitos, como garantizar una mejor adherencia de la pintura, aumentar su durabilidad y proporcionar protección adicional. Las imprimaciones son soluciones que se parecen menos a la pintura y más al pegamento, ya que se adhieren a lo que se está preparando y sellan el sustrato para garantizar un acabado bueno y uniforme que durará muchos años.
Es importante tener en cuenta que existen dos tipos de imprimación. En primer lugar, la imprimación puntual es para pequeñas zonas de parcheo y espacios menores en los que se ha eliminado pintura descascarillada. La segunda es la imprimación completa, que se aplica sobre grandes áreas desnudas o superficies que pueden tener colores oscuros o un brillo desigual.
Cuándo cebar
Como norma general, la imprimación debe utilizarse en superficies que nunca se hayan pintado, que tengan un aspecto irregular o manchas visibles, así como en zonas que tengan una pintura de color oscuro que se cubrirá con una pintura de color claro o que tengan un revestimiento desconocido.
Para paredes interiores, la imprimación también se recomienda en el caso de reparaciones o remodelaciones de paredes. Independientemente del tipo de superficie (paneles de yeso, escayola, carpintería, etc.), la imprimación garantiza el sellado de la superficie para que la pintura de acabado se adhiera y se seque con un acabado liso y uniforme.
Cuando se trata de pintar exteriores, casi siempre se necesita imprimación, ya que estas superficies están sometidas constantemente a condiciones duras, como la humedad y los rayos UV. Este tipo de exposición provoca el deterioro de la superficie, lo que dificulta la adherencia de la pintura. Además, las imprimaciones son siempre recomendables cuando se pintan superficies como madera, mampostería y metal. Además de proporcionar una buena adherencia, las imprimaciones están diseñadas para tratar específicamente condiciones comunes como la eflorescencia en la mampostería o las manchas de tanino en el cedro y las secuoyas.
Asegúrese de tener en cuenta el tipo de superficie, ya que algunas imprimaciones son específicas para cada sustrato. Por ejemplo:
Tableros de yeso nuevos - Opte por la imprimación para tableros de yeso, ya que los tableros de yeso son porosos y deben sellarse con un sellador o pintura autoimprimante.
Madera desnuda - Utilice una imprimación para madera, ya que la madera contiene ácidos tánicos que pueden traspasarla.
Manchas - Elija una imprimación antimanchas para las manchas, ya que evita que éstas aparezcan a través de la capa de acabado.
Metal desnudo - Utilice una imprimación metálica, especialmente para metales ferrosos, ya que necesitan prevenir contra el óxido.
¿Qué imprimaciones debe utilizar?
Hay una imprimación perfecta para casi todas las superficies. Y, sin duda, con la imprimación se consigue un trabajo de pintura mejor y de aspecto más profesional. Pero, ¿cómo elegir? Mientras que algunas recomendaciones son adecuadas para proyectos de repintado y/o mantenimiento, hay que considerar con más cuidado la selección de la imprimación cuando se trata de especificaciones de pintura en proyectos de nueva construcción. He aquí algunos ejemplos de cómo elegir la imprimación adecuada para su superficie:
Manchas y olores de interior - Algunas manchas traspasan la mayoría de imprimaciones y pinturas sin importar cuántas capas se apliquen. Lo mismo ocurre con los olores penetrantes como el humo de incendios o cigarrillos. La mejor solución es una imprimación antimanchas como BLOCK-IT® Premium.
Tablero de yeso nuevo - El barro utilizado en las juntas del tablero de yeso absorbe la pintura de forma diferente al resto del tablero de yeso, lo que puede dar lugar a zonas manchadas y apagadas bajo la pintura y a un brillo inconsistente. En esta situación, la mejor opción es utilizar una imprimación-sellador para paneles de yeso como VINYLASTIC® Premium.
Madera nueva - Si su madera no está seriamente manchada, una imprimación de látex de alta calidad o una imprimación a base de aceite se ajustarán a sus necesidades. Si la madera está manchada o va a pintar secuoya o cedro, utilice una imprimación antimanchas como EZ-PRIME® Premium.
Mampostería - Utilice una imprimación fortificada con epoxi, como EFF-STOP® Premium, para promover una excelente adhesión y resistencia a la eflorescencia en mampostería porosa, incluyendo estuco, ladrillo o bloque de hormigón.
Bloque de hormigón - Rellene una superficie nueva con masilla para bloques antes de pintar para garantizar un acabado más liso. Si vuelve a pintar, raspar cualquier pintura suelta o descascarada y cubrir con pintura de látex. Utilice relleno de bloques como Smooth BLOCFIL™ Premium sólo si la pintura ha sido completamente raspada.
Metal - Si su superficie está oxidada, elimine el óxido y aplique una imprimación resistente a la corrosión, como BLOC-RUST® Premium para metales ferrosos o GALV-ALUM™ Premium para superficies de metal galvanizado y aluminio.
Si tiene alguna duda sobre qué imprimación utilizar, póngase en contacto con su representante local de Dunn-Edwards.