La importancia de los sistemas de imprimación y acabado
02/12/2018 | Dunn Edwards |
¿Cree que la preparación no es importante? Piénselo otra vez.
En los últimos años, un número cada vez mayor de fabricantes de pintura ha estado promocionando las ventajas de la pintura "autocebante" para reducir costes y acortar el tiempo de pintado. Pero, ¿qué significa eso exactamente? ¿Olvidar este importante paso, así como no aplicar una capa de acabado de calidad, dará como resultado un trabajo de pintura bonito? Difícilmente. En realidad, para obtener resultados profesionales, hay que imprimar primero. He aquí por qué:
Más allá del hecho de que siempre ha sido una buena práctica imprimar las superficies antes de coger la brocha, la imprimación es vital para sellar las manchas, producir un acabado más uniforme y nivelado, y crear una mayor adherencia entre la superficie y la capa final. La imprimación es especialmente recomendable cuando se pinta un color claro sobre una superficie oscura, ya que garantiza que el color intenso no se vea a través del tono más transparente.
Existe una amplia gama de imprimaciones adecuadas para superficies concretas -incluidos paneles de yeso, metal y hormigón- o que abordan un problema específico, como cubrir manchas o evitar la aparición de manchas de tanino y moho. Los paneles de yeso nuevos, que son excepcionalmente porosos, absorben la pintura como una esponja. La imprimación evita este problema rellenando los poros y reduciendo eficazmente el número de capas necesarias. Otro sustrato que se beneficia enormemente de la imprimación es el vallado metálico, ya que el uso de imprimación específica para metal protege la superficie contra el óxido y proporciona una base sólida para futuros revestimientos.
Cuando se trata de autoimprimación, es importante tener en cuenta que la competencia no ofrece propiedades de imprimación como el bloqueo de manchas. Y, al pintar exteriores, no utilizar una imprimación de calidad puede provocar una serie de problemas, como agrietamiento, descascarillado, descascarillado, ampollas, moho, manchas, caleo y decoloración, nada de lo cual usted (o su cliente) desea. Las pruebas realizadas por el Paint Quality Institute, un grupo de investigación independiente del sector, han demostrado que una sola capa de acabado sobre una superficie bien imprimada ofrece mejores resultados que dos capas de acabado aplicadas directamente sobre la madera.
Estas son algunas de las mejores prácticas que le ayudarán a conseguir un trabajo de pintura superior:
- Utiliza una espátula metálica para raspar la pintura agrietada o descascarillada, así como los bultos que quedan al retirar un clavo.
- Rellene los agujeros y huecos con masilla para yeso o masilla para juntas. Deje que se seque completamente antes de lijar.
- Limpie las superficies con una esponja de fregar y una mezcla diluida de un limpiador que no haga espuma (un detergente que cree espuma hace que la pared sea demasiado resbaladiza para retener la pintura). La esponja limpiará, lijará y dará rugosidad a la superficie para mejorar la adherencia.
- Aplique dos capas para obtener los mejores resultados. Algunas empresas de pintura afirman que se puede cubrir con una sola capa, pero la verdad es que un trabajo de pintura de calidad necesita dos capas para mejorar la durabilidad y la cobertura.
- Utiliza siempre una imprimación y una capa de acabado, no importa lo que te digan.
Recuerde que la imprimación y el acabado adecuados suelen pasarse por alto, lo que se traduce en mayores costes y pérdidas de tiempo al tener que arreglar fallos y volver a pintar. Dedique tiempo a elegir y utilizar el tipo de imprimación adecuado para garantizar que su próximo proyecto de pintura sea bonito y duradero.