SELECCIÓN DEL BRILLO DE LA PINTURA

Seleccionar el brillo adecuado para su proyecto de pintura puede ser todo un reto. A continuación se explican las consideraciones prácticas y estéticas para elegir el brillo que le ayudarán a tomar las decisiones correctas.

Terciopelo

Las pinturas aterciopeladas se asemejan a las pinturas planas cuando se miran de frente, pero muestran un ligero brillo cuando se miran desde un ángulo. Este brillo ligeramente superior proporciona una superficie más lavable o fregable. Estas pinturas son ideales para zonas muy transitadas, como pasillos y habitaciones infantiles.

Cáscara de huevo

Las pinturas de cáscara de huevo son un paso más brillantes que las de terciopelo. Transmiten mayor calidez y profundidad a las superficies que las pinturas planas. La cáscara de huevo también tiende a resistir mejor las manchas que las pinturas planas o de terciopelo, aunque no tan bien como las pinturas semibrillantes y de alto brillo. Al igual que las pinturas aterciopeladas, estas pinturas son ideales para zonas con mucho tránsito, como comedores o habitaciones infantiles.

Satinado/Bajo brillo

Las pinturas satinadas/de bajo brillo son similares a las pinturas de cáscara de huevo, pero tienen un brillo ligeramente superior. Son una buena elección para zonas en las que se desea algo de brillo, pero también se necesitan buenas propiedades de limpieza, como cocinas, lavanderías y baños. Sin embargo, su aspecto ligeramente brillante tiende a resaltar las imperfecciones de la superficie más que las pinturas planas.

Semibrillante

Las pinturas semibrillantes tienen un aspecto ligeramente brillante y son menos reflectantes que las brillantes. Ofrecen buena resistencia a las manchas, son fáciles de limpiar y se utilizan sobre todo en estancias que requieren un fregado frecuente, como cocinas y baños. Los semibrillantes también son una buena alternativa a las pinturas brillantes para ventanas, molduras, armarios y puertas.

Brillo

Las pinturas brillantes tienen un aspecto muy reflectante que les confiere un aspecto liso y contemporáneo. Son fuertes, duraderas y resistentes a las manchas. Las pinturas brillantes son más fáciles de limpiar que las pinturas menos brillantes y suelen utilizarse en cocinas, baños y puertas y armarios expuestos a huellas dactilares y suciedad. Debido a su alta reflexión, la pintura brillante puede resaltar las imperfecciones de la superficie.

Alto brillo

Las pinturas de alto brillo tienen el aspecto más reflectante. Son los acabados más duros, duraderos y resistentes a las manchas. Las pinturas de alto brillo son las más fáciles de limpiar y se utilizan normalmente en puertas y armarios expuestos a la suciedad y el aceite, y también pueden emplearse en molduras y algunos trabajos de carpintería. La pintura de alto brillo puede resaltar las imperfecciones de la superficie.